Fotos con mi ex

9 de abril de 2025

El Dr. José Carbonell plantea una cuestión común tras una ruptura: ¿qué hacer con las fotos en las que sales bien, pero estás con tu ex? Según él, el problema no es la imagen en sí, sino la carga emocional que estas fotografías pueden traer.


Explica que al ver esas fotos, especialmente si capturan momentos felices, es fácil idealizar el pasado y generar una morriña que puede interferir con el presente y el futuro, especialmente si se está en una nueva relación. Esta tendencia a romantizar lo que ya fue puede hacer que volvamos a conectar emocionalmente con alguien que, en su momento, dejamos atrás por alguna razón.


Su consejo es claro: extinción. Recomienda apartar todo aquello que actúe como un ancla emocional, ya que el objetivo tras una ruptura es avanzar sin estar constantemente recordando lo que fue. Aunque hay personas con más "estómago" que pueden convivir con estas imágenes sin mayor problema, Carbonell sugiere guardarlas en una carpeta apartada o eliminarlas para evitar posibles interferencias en la vida actual.



Además, menciona un detalle interesante: los dispositivos como el iPhone pueden traer recuerdos inesperados que saboteen el proceso de seguir adelante. Por ello, sugiere manejar estas fotos con precaución para evitar que, sin quererlo, terminen afectando emocionalmente el presente.

Por Instituto Carbonell 18 de abril de 2025
El Dr. José Carbonell, médico y psiquiatra, aborda una realidad dolorosa pero frecuente tras una ruptura amorosa: vivir aferrado a la esperanza de que la otra persona va a volver. Explica que muchos pacientes, incluso después de hacer el duelo inicial, siguen esperando que su expareja recapacite, se dé cuenta de lo que ha perdido y quiera retomar la relación. Este tipo de pensamiento lleva a comportamientos como seguir a la otra persona en redes sociales, evitar bloquearla, mandar indirectas a través de amigos, o incluso mantener tu vida en pausa, solo con la expectativa de un posible regreso. El Dr. Carbonell considera esto un error, porque no solo genera sufrimiento, sino que también te resta valor ante la otra persona. Una de las ideas clave del vídeo es que no podemos controlar lo que no depende de nosotros. No está en tus manos cambiar cómo la otra persona se siente, ni obligarla a que te perdone, ni hacer que vea lo que ha perdido. En cambio, sí puedes decidir centrarte en ti mismo: retomar tus hobbies, viajar, mejorar tu alimentación, cuidar tu imagen, avanzar en lo profesional y, en definitiva, reconstruirte como persona. Y añade un punto muy valioso: cuando tú comienzas a florecer, quizás esa persona vuelva a interesarse. O puede que no. Pero lo más importante es que, si lo hace, seas tú quien valore si realmente te interesa volver a intentarlo con alguien que en su momento te hizo daño o no supo valorar la relación.  Este enfoque invita a romper con la dependencia emocional, asumir el cierre como parte del crecimiento, y recuperar tu autonomía emocional. No se trata solo de “olvidar”, sino de reinventarte con dignidad y fuerza, sin poner tu vida en pausa por alguien que, por ahora, ha decidido no estar.
Por Instituto Carbonell 17 de abril de 2025
El Dr José Carbonell parte de una situación que le compartió una paciente, donde ella no sabía si debía dejarse llevar por lo que sentía o tomar una decisión más lógica basada en lo que le convenía. Él señala que este tipo de dilemas es muy habitual y no tiene una única respuesta, pero sí puede abordarse con algunas pautas de análisis para tomar decisiones con mayor conciencia. Primero, insiste en que hay que revisar cómo estás tú emocionalmente. Si estás atravesando una crisis personal, estrés o un momento emocionalmente inestable, no estás en el mejor punto para decidir. Es esencial tener cierta estabilidad para valorar con claridad si lo que sientes es amor real o una necesidad emocional momentánea. Segundo, recomienda pensar en las consecuencias reales de seguir o no con esa persona. No solo en términos de sentimientos, sino también en cómo eso afectará tu vida personal, tu entorno, tu familia, e incluso tu trabajo. La razón entra aquí como un ejercicio de anticipar el impacto real que tendrá tu decisión. Tercero, invita a reflexionar sobre el futuro: ¿Te ves con esa persona a corto, medio y largo plazo? ¿Existe una visión de vida compartida? Esta parte no niega el amor, sino que lo complementa con una mirada más práctica que te ayudará a decidir si hay una base sólida para continuar.  En definitiva, el Dr. Carbonell no te dice si elegir el amor o la razón, sino que te enseña a combinar ambos enfoques con conciencia, evaluando tu estado emocional, las consecuencias y la proyección futura. Solo así podrás tomar una decisión que no sea impulsiva ni completamente fría, sino equilibrada y alineada contigo mismo.
Por Instituto Carbonell 16 de abril de 2025
Cuando el "Luego" nunca llega: